Encabezados por la dirigente estatal de Morena, Brighite Granados, un aproximado de 300 personas se manifestaron a las afueras del Congreso del Estado a fin de exigir a la gobernadora, María Eugenia Campos, que deje de entrometerse en el Proceso Electoral local que se encuentra en curso.
Esto, luego de que la semana pasada el coordinador de la bancada morenista, Cuauhtémoc Estrada, acusó el “nado sincronizado” entre el Instituto Estatal Electoral (IEE), el Tribunal Estatal Electoral (TEE), el Poder Ejecutivo y parte del Poder Legislativo a fin de impedir que ocho de los actuales diputados de ese partido puedan reelegirse.
Granados De La Rosa externó la preocupación que mantienen respecto a la intromisión de Campos Galván en la contienda electoral, por lo que exigió a que “si se dice demócrata, que lo demuestre y deje de meterse en las decisiones internas de Morena”. Además, señaló que “lo que no pueden ganar en territorio, lo quieren ganar en los tribunales”.
Recordó que los actuales legisladores han sabido defender los intereses de los chihuahuenses, lo cual ha resultado incomodo para la titular del Ejecutivo Estatal, motivo por el cual acusan que están utilizando una denuncia presentada por la también morenista y presidenta del Congreso del Estado, Adriana Terrazas, en su contra.
Y es que dicha denuncia en cuestión es por violencia política de género y, de validarse ese caso y recibir sentencia, los compañeros de Terrazas Porras quedarían impedidos de reelegirse, toda vez que no cumplirían con la ley ocho de ocho.
La dirigente morenista dijo que no cuentan con un “plan b” dado que “nuestro plan es que quien eligió la gente sean los que contiendan por esos Distritos”, pues enfatizó que fue la misma militancia la que decidió los candidatos para cada uno de los diferentes cargos de elección popular que aparecerán en las boletas.