EFE.-
El Sindicato del Nacional Monte de Piedad, la mayor casa de empeños de México, concluyó este jueves una huelga de un mes tras lograr un incremento salarial del 18%, entre otras mejoras laborales.
“Los trabajadores sindicalizados, de manera personal, libre y secreta, votaron a favor del convenio de incremento salarial del 18% que el sindicato alcanzó hace algunos días con la administración del Nacional Monte de Piedad”, informaron los trabajadores en un comunicado.
El convenio alcanzado, precisó el sindicato, incluye además del incremento salarial, la reinstalación de trabajadores despedidos de forma injustificada y el pago 100% de salarios caídos para despedidos y huelguistas.
“Con ello se da por concluida la huelga y en las próximas horas el Nacional Monte de Piedad podrá reanudar sus actividades”, anunciaron.
Asimismo, dijeron que se están llevando a cabo todos los trámites jurídicos necesarios en el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral, y con la jueza Karime Pérez Guzmán, para dar por concluida legalmente la huelga y permitir que el Nacional Monte de Piedad pueda reanudar sus operaciones.
El conflicto, que estalló el pasado 14 de febrero, se agudizó en junio pasado, cuando los directivos del Nacional Monte de Piedad de México, fundado en 1775, advirtieron de que quebraría en 2027 si no cambia el contrato colectivo.
Los líderes de la institución de asistencia privada argumentaban que el contrato que tenían contenía “prestaciones ostentosas” que no podían sustentarse ante una “clara baja” en México del volumen de operaciones del sector prendario, que consiste en casas de empeño donde la gente deja un objeto a cambio de un préstamo.
Sin embargo, el sindicato argumentó que el salario más bajo correspondía a los mozos de sucursales foráneas, con 246.35 pesos al día, mientras que el más alto era el del responsable de la depositaría con 491.19 pesos.
Ahora, todos los trabajadores, aseguraron, tendrán un incremento del 18%, además de que se realizarán ajustes al contrato colectivo de trabajo, como la compactación de algunas plazas laborales y la ampliación de la jornada laboral a 40 horas, entre otros.
Este paro de labores reflejó el nuevo panorama laboral en el país tras las reformas que permitieron una mayor democracia sindical como parte del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en vigor desde 2020.