Los trabajadores se han mostrado inconformes con las afirmaciones de funcionarios que no saben cómo el número del editor jefe de The Atlantic fue agregado al grupo

Por: Latinus

Trabajadores de la Casa Blanca y aliados del presidente Donald Trump han expresado sus preocupaciones y enojo ante la estrategia de Mike Waltz, asesor de Seguridad Nacional, para mitigar el escándalo por la difusión de mensajes entre varios altos funcionaros en un grupo de la aplicación de mensajes, en el que hablaban del plan para atacar a los rebeldes hutíes de Yemen. 

Algunos funcionarios de la administración del republicano están indignados porque «Waltz no admitió su error y siguió adelante», de acuerdo con el medio estadounidense Politico.  

Según el medio, los trabajadores no están conformes con las afirmaciones del asesor de Seguridad de no saber cómo el número de Jeffrey Goldberg, editor jefe de la revista The Atlantic, fue agregado al grupo de Signal. 

Un alto funcionario de la administración declaró que tras el incidente, Trump le ofreció a Waltz la oportunidad de admitir un fallo técnico, sin embargo, dijo no saber cómo se añadió el número de un periodista a su celular, por lo que pidió ayuda a Elon Musk para averiguarlo. 

Esto alarmó a oficiales administrativos porque la decisión de pedirle a Musk que investigue la filtración de mensajes podría llevar a un mayor daño político. 

Por su parte, otra persona cercana a la Casa Blanca declaró a Politico que Waltz nunca ha hablado con Goldberg y que desconoce cómo su número terminó en su celular; sin embargo, estas declaraciones podrían ser dañinas si alguien cuenta con una fotografía del periodista con el asesor, advirtió la fuente.

Don Bacon, representante republicano de Nebraska en la Cámara de Representantes, calificó como «un grave error» que se añadiera al periodista al grupo y afirmó que «la Casa Blanca está en negación de que no era información clasificada o datos sensibles». 

Demócratas critican la brecha de seguridad

Durante la comparecencia del martes 25 de marzo, el senador Jon Ossoff, un demócrata por Georgia, afirmó que «esto es una vergüenza» mientras cuestionaba al director de la CIA, John Ratcliffe. 

“Es completamente poco profesional. No se han ofrecido disculpas. No se ha reconocido la gravedad de este error”, condenó después de que Ratcliffe dijera que no fue grave el error.

En el periodo previo a su victoria electoral de 2016 sobre la demócrata Hillary Clinton, Trump instó a que se procesara penalmente a la exsecretaria de Estado por comunicarse con relación a información confidencial con sus colaboradores a través de un servidor de correo electrónico privado que ella configuró.

El asunto estuvo bajo investigación, pero el FBI finalmente recomendó no presentar cargos, lo cual se cumplió.

Clinton fue una de las demócratas que criticó esta semana el uso de Signal por parte de los funcionarios del gobierno.

“Tiene que ser una broma”, dijo Clinton en una publicación en X que destacaba el artículo de The Atlantic e incluía un emoji de ojos.