Sergio Pérez tiene la última palabra sobre su futuro con Red Bull
Sineli Santos / Agencia Reforma
Ciudad de México.- Sergio Pérez podría estar viviendo sus últimos días como piloto de Red Bull.
Independiente del resultado que obtenga en el Gran Premio de Abu Dhabi, el mexicano puede elegir entre dar por terminada su relación con el equipo de las bebidas energéticas o arriesgarse a continuar en 2025 bajo un sistema de trabajo que no le permite explotar al máximo sus habilidades con el volante.
En cuestión de números, la versión de Checo de este 2024 es la peor de las últimas 4 campañas porque después de 22 carreras -sin contar Qatar y Abu Dhabi-, 152 puntos, 4 podios, 6 top 5 y cero victorias, el octavo lugar en el Campeonato de Pilotos es lo máximo que pudo alcanzar.En 2023, con el poderoso RB19, el tricolor fue subcampeón con 285 unidades -su segunda mejor cosecha desde que llegó a Milton Keynes, ya que en 2022 acumuló 305 tantos-, 9 top 3, 2 victorias, en Arabia Saudita y Azerbaiyán, y contribuyó con el 33 por ciento de las 860 unidades que le dieron a la franquicia el título de constructores.
La caída de rendimiento del originario de Guadalajara, Jalisco, de una temporada a otra fue del 46 por ciento, un dato alarmante, pero que sí se compara con su compañero Max Verstappen, que pasó de 575 puntos en 2023 a 403 en 2024, quiere decir que hay dos factores en común: el performance y el rendimiento del monoplaza que afectó a todos en el garaje.El neerlandés no logró replicar las 19 victorias, solo capitalizó 9, y si bien es cierto que defendió la corona, por su cabeza pasó la idea de dejar su lugar si la situación no mejoraba.
Caso contrario al tricolor. Por más rumores que se desataron y las constantes invitaciones al retiro, ha afirmado que cumplirá con su contrato, aunque implique más desgaste emocional y cero empatía del lado de los altos mandos.La reunión que tendrán el 8 de diciembre el jefe Christian Horner, el asesor Helmut Marko y Checo, será vital para definir el camino a seguir.
Están amarrados por un año más
La técnica de convencimiento que Red Bull está utilizando con Sergio Pérez para que deje su lugar en 2025 está funcionando.El abandono del mexicano en Qatar por falta de potencia en el motor y las bajas temperaturas de los neumáticos, detonaron una serie de indirectas de parte de Christian Horner, jefe del equipo, en donde sugería a su piloto analizar si realmente valía la pena quedarse en Milton Keynes un año más.La escudería y Checo están atados por un contrato de 1+1, ya que el segundo año dependería exclusivamente de los puntos, victorias y podios que registre en 2025, y si el ponerle fin a esa firma, la indemnización por daños y prejuicios rondaría hasta los 40 millones de dólares.Y no sería lo único que perderían. El paquete de patrocinadores, liderado por América Móvil (Telmex, Telcel, Claro), que acompaña al conductor de 34 años, dejaría de aportar la cantidad mensual -entre 10 y 20 millones de dólares- que cubría el sueldo de Pérez.Los 152 puntos que registra el tapatío fueron insuficientes para que Red Bull conservara el primer lugar en el Campeonato de Constructores y como consecuencia cayó hasta el tercer escalón.Así que la compensación económica que recibirán se reduce de 140 a 122 millones de dólares, aproximadamente, lo que ya ocasionó el disgusto de los trabajadores de la fábrica dirigido únicamente al monoplaza número 11, pues Max Verstappen, con todo y los problemas, ha aportado 429 unidades, casi el triple.Dentro de una semana se conocerá que decidieron ambas partes y quién pierde más en el negocio de la Fórmula Uno.
Podría ser embajador
Cuando una puerta se cierra, otra se abre.Oficialmente, Sergio Pérez se mantiene como piloto de Red Bull para 2025, pero, en caso de anunciar su salida voluntaria del equipo después del GP de Abu Dhabi, última carrera del año, la gran incógnita sería el siguiente paso.Una de las cláusulas que los austriacos incluyen en los contratos de sus conductores es mantenerse en la franquicia como embajadores de marca.Daniel Ricciardo, quien fue despedido a mitad de año, es el encargado de acudir a la mayoría de los eventos publicitarios, aparecer en comerciales y ganar seguidores con su carisma.El tapatío entraría en esa área sin la posibilidad de probar el monoplaza y se aprovecharía su popularidad en Estados Unidos para establecerse con el producto de las bebidas energéticas.Si el deseo de Pérez es continuar en las pistas, la Fórmula E le tiene un lugar reservado, al igual que el Campeonato Mundial de Resistencia o la European LeMans Series.Otro escenario que le espera a Checo es volver a la F1 en 2026. Algunos pilotos terminan sus contratos y ahí se liberaría alguna plaza.La nueva escudería GM/Cadillac está en busca de una alienación sólida que tenga presencia en el continente americano, y quien mejor se acomoda a esa vacante es el mexicano.
Lawson, el candidato
El asiento de Sergio Pérez es uno de los más codiciados en la F1 por tratarse de Red Bull, que tiene las herramientas para ganar, pero que a la vez exige compromiso, concentración y capacidad para aguantar la presión.Franco Colapinto está descartado tras sus accidentes en Brasil, Las Vegas y Qatar, las opciones están dentro del equipo hermano, Racing Bulls.Liam Lawson lleva la delantera pese a su poca experiencia, mientras que Yuki Tsunoda y el piloto de Fórmula 2, Isack Hadjar, quedarían en RB.
Las claves de la caída
LA ACTUALIZACIÓNDos meses después del inicio de la temporada, Red Bull introdujo su primer paquete de mejoras en el RB20. El fondo del monoplaza fue rebajado, se perfiló el morro y se ajustó la posición del alerón delantero, pero para Checo fue contraproducente.
RESULTADOS DE MAXLa pérdida de rendimiento en el monoplaza pasó desapercibida del lado de Checo porque su compañero Max seguía dominando con victorias en Imola, Canadá y España.Después de Austria, ambos pilotos reportaron inestabilidad en el auto y pérdida de velocidad.
MALAS CALIFICACIONESAl no tener confianza en el bólido, el piloto mexicano tardó el doble de tiempo en encontrar la puesta ideal a una vuelta en casi la mitad de las citas de la temporada.En total, fueron 9 Qualys en las que quedó eliminado en la primera o segunda etapa.
SIN SOLUCIONESEl plan de recuperación de Red Bull se enfocó en Max Verstappen al estar en juego en Campeonato de Pilotos.Aquellas piezas que sí funcionaban o ayudaban a un mejor desempeño eran colocadas en el monoplaza número 1 y Checo debía esperar para probarlas.
DOBLE DISCURSOMientras el tapatío reafirmaba su permanencia en el equipo para 2025, los altos mandos de Red Bull, principalmente Helmut Marko, le metían presión mencionando sus errores y culpándolo de perder el Campeonato de Constructores por los puntos que no sumó.