La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, destacó la reforma fiscal destinada a transformar la estructura tributario de Pemex.
Por: Tiempo
En sus declaraciones, Sheinbaum explicó que, hasta el momento, Pemex enfrenta un sistema de derechos e impuestos que incluía varios pagos como el derecho de exploración, el derecho de extracción de hidrocarburos y el derecho de utilidad compartida, establecidos por la reforma energética del 2013. Estos derechos eran difíciles de calcular y representaban una carga considerable para la empresa, al punto de que el 70% de los ingresos generados por Pemex se destinaban al pago de estos gravámenes.
Uno de los principales cambios que introduce la nueva reforma es la sustitución de este sistema múltiple de pagos por un único derecho. A partir de ahora, Pemex pagará un solo derecho petrolero para el bienestar, cuyo porcentaje estará principalmente asociado a la producción de petróleo. Este derecho se fijará en un 30%, con la posibilidad de que sea aún menor en ciertos casos. Para el gas, dada la mayor complejidad de su extracción, este derecho será del 11.63%.
«Lo que buscamos es que Pemex pueda capitalizar sus recursos de manera más eficiente, sin sacrificar su capacidad de producción, y que los ingresos que genera se utilicen para su fortalecimiento y para el bienestar de la sociedad», declaró Sheinbaum. La mandataria subrayó que este nuevo esquema no solo ayudará a la petrolera a mantenerse financieramente sana, sino que también garantizará una distribución más clara y transparente de los recursos.